La identidad sexual puede o no estar relacionada con la orientación sexual. La identidad de género es una adquisición fundamental en el desarrollo de la personalidad que más adelante puede abarcar las esferas sexual y reproductiva. La identidad de género se consolida durante la separación-individuación en etapas tempranas del desarrollo.

Todos asumimos en función de si nacemos hombre o mujer que nuestra identidad seguirá un patrón establecido. Sin embargo, lo que ocurre cuando sentimos una cosa (es decir, masculino/femenino) y parecemos lo contrario, entonces podemos esforzarnos por igualar ambas tendencias opuestas con gran sufrimiento. Los psicólogos clínicos saben cómo desarrollar estas emociones que te permitirán sentirte a gusto con quien realmente eres