Problemas de sueño psicológicos
Problemas de Sueño Psicológicos
A lo largo de nuestra vida, nuestras necesidades de sueño cambian. Sin embargo, hay pautas y comportamientos que favorecen o dificultan un sueño reparador. La falta de sueño exacerba la irritabilidad, el mal humor, la tristeza y la fatiga.
La falta de sueño puede presentarse sola o acompañada de dificultades emocionales o psicológicas. Cuando no se duerme lo suficiente, empeoran la depresión, la ansiedad, el estrés o los problemas psicológicos. Dado que el sueño tiene un fuerte efecto sobre el estado de ánimo, es prioritario tratarlo en terapia.
Por ejemplo, cuando el paciente tiene dificultades para conciliar el sueño o para permanecer dormido y se despierta con frecuencia, se asocia a problemas de ansiedad, pero si se despierta demasiado temprano por la mañana, puede deberse a una depresión.
Por experiencia clínica, he descubierto que las dificultades para conciliar el sueño se asocian a veces con el miedo, que activa un mecanismo en el cerebro que dice algo así como «mantente despierto, tienes que estar alerta». Un colega biólogo dijo «es como en la naturaleza, si temes que te ataquen, tu cerebro te hará permanecer despierto». Por lo tanto, trabajar el miedo puede facilitar la vuelta a un sueño nocturno reparador normal.
Un psicólogo clínico puede ayudarle a identificar la interferencia o la causa de las dificultades para dormir, ya sea biológica, emocional o conductual, y ayudarle a recuperar patrones de sueño reparador.
Existen diversas terapias que han demostrado su eficacia para resolver los problemas de sueño; las dos mejores son la psicoterapia y la terapia cognitivo-conductual (TCC). En la actualidad, la TCC engloba una amplia variedad de técnicas conductuales que pueden combinarse para obtener el enfoque de tratamiento más eficaz para obtener un resultado positivo. Algunas de estas técnicas están relacionadas con la terapia de control de estímulos, la restricción del sueño, la higiene del sueño, la mejora del entorno de sueño, el clásico entrenamiento en relajación o el tradicional Biofeedback.
Quiero mencionar una consulta reciente en la que utilicé el modelo CBT para tratar un problema de sueño. Traté a un veterano de guerra por falta de sueño reparador y despertares nocturnos. Describió haber sobrellevado bastante bien durante su vida las experiencias que soportó mientras estuvo en el ejército. No creía que estuviera relacionado con nada de su experiencia como soldado, pero la evaluación y la formulación de sus dificultades revelaron que se había retirado recientemente y que sus pensamientos y sentimientos sobre la jubilación eran muy similares a los experimentados al final de su carrera en el ejército. Ya no se sentía útil y esos pensamientos le provocaban ansiedad mientras dormía, ya que le parecía que era como perder el tiempo cuando aún podía ser productivo. Su cerebro había asociado la vigilancia durante la guerra con la productividad. Cuando se jubiló, se sintió menos productivo y su cerebro se ha vuelto vigilante por la noche para compensar esos sentimientos y ser más productivo.
Trabajar los vínculos entre sus experiencias vitales, sus pensamientos y sus sentimientos le permitió volver a un sueño nocturno normal.
Sin embargo, en un escenario más complejo, el uso de la psicoterapia resultó ser más exitoso. Se trataba de una doctora que sentía ansiedad antes de irse a dormir y, por lo tanto, evitaba quedarse dormida en el sofá para ir a la cama. Esto resultaba en que se sentía muy cansada por la mañana y no podía concentrarse en sus pacientes debido al corto tiempo de sueño que podía obtener.
Este fue un caso complejo y el insomnio no era el peor de sus síntomas. Sin embargo, durante el tratamiento de psicoterapia, pudo asociar que sentía angustia antes de irse a la cama, ya que se dio cuenta de que no podía renunciar a su control sobre la conciencia, porque temía no despertar. Esta realización le permitió resolver parte de su ansiedad y, con éxito, irse a la cama más temprano.
¿Cuál es el tratamiento más efectivo para el insomnio?
- Para que el tratamiento sea efectivo, necesitamos conocer la causa del problema de sueño. En este sentido, la evaluación es la mejor herramienta para decidir el tratamiento más adecuad
¿Qué terapia es buena para dormir?
- Si el problema de sueño está entrelazado con otros problemas emocionales, un curso de psicoterapia puede ayudar a volver a un sueño normal. Cuando los problemas de sueño son la causa principal, las terapias cognitivas o conductuales abordarán el problema del sueño más rápidamente.
¿Puede un terapeuta ayudarme a dormir?
- Un terapeuta capacitado y experimentado, como un psicólogo clínico, es la mejor solución para ayudar con los problemas de sueño. Los psicólogos clínicos están entrenados para abordar dificultades emocionales, cognitivas o conductuales que pueden estar relacionadas con las dificultades para dormir.
¿Cómo puedo resolver mis problemas de sueño?
- El primer paso será contactar a un psicólogo clínico para una evaluación que ayude a entender o formular la naturaleza de la dificultad para dormir.
¿Cómo se desarrolla la terapia del sueño?
- Durante la evaluación, hablaremos sobre tu vida, lo que haces o cómo te sientes; el enfoque estará en descubrir cuál es la causa del problema de sueño.
- Esto guiará qué tratamiento resultará más exitoso para abordar el problema de sueño.
- Solo se necesitan unas pocas sesiones para determinar cualquier mejora o cambio en el problema de sueño que se presenta. En el tratamiento de problemas de sueño, constantemente re-evalúo lo que hemos hecho para continuar guiando el tratamiento. Esto es con el fin de obtener los mejores resultados, que son que vuelvas a patrones de sueño reparador normales.
¿Cuánto tiempo dura la terapia del sueño?
Si los problemas de sueño son un problema primario, encontrarás que solo se necesitan unas pocas sesiones para restaurar el sueño normal.
Si la falta de sueño es causada por otros problemas psicológicos, aún abordaremos el problema del sueño como una prioridad, pero puede requerir invertir en más sesiones, ya que puede estar entrelazado con otros sentimientos, comportamientos o situaciones.
